Móviles, wifi, routers, antenas, estaciones base, torres eléctricas, baja tensión, inalámbricos... estamos rodeados!
La tecnología no es mala por sí misma, pero sí el abuso. Y estamos abusando mucho. Demasiado.
A las personas que más están sufriendo con la contaminación electromagnética se les llama EHS,
ElectroHiperSensibles, y nos mandan un ¡SOS EHS, ya no aguantamos más!
Os presento mi último trabajo, el documental:
Porque las radiofrencuencias nos afectan a todos, aunque por ahora algunos no notemos su efecto.
Porque la contaminación electromagnética nos envuelve por doquier, y ya no queda un lugar mundo que no esté conectado...
Porque hay otras opciones más biocompatibles.
Porque queremos volver a ser libres!
Entrevistas de algunos de los participantes: